martes, 6 de febrero de 2007

Caramelo

one of his first lollies everLa sensación pastosa en la boca cuando te despiertas de una siesta en el sofá. La certeza que te hace frenar en mitad de las escaleras del metro y buscar con la mirada un quiosco abierto. Tamborilear con los dedos sobre la mesa después de zamparte una trucha a la espalda. Sabes lo que es. Sabes lo que necesitas. Helado. Chocolate. Una naranja. Tres mandarinas. Tarta de queso.

Azúcar.

Hace dos sábados que Bruno probó su primera piruleta. Fue en el cumpleaños de un colega. En el parque, a una temperatura siberiana. Felicidad con sabor a fresa.

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